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#2354
M. López
Participante

Perdón, me llamo Montse
Gracias Roberto por tu respuesta

Como parece que te gusta la tierra (por lo que dices), te explico lo que hago. En realidad lo que intento es integrar los cultivos en el entorno.

Para ello entre los cultivos dejo crecer plantas silvestres que crecen espontáneas y que pueden ser útiles o comestibles como esparragueras – cola de caballo – verdolaga, y las que interfieren con ellos las voy arrancando. Entre los espacios cultivados dejo espacios sin cultivar en los que crecen las plantas del suelo que siguen su ciclo, dando por ejemplo flores para los insectos y protegiendo la tierra, de vez en cuando siego esta vegetación y me sirve como acolchado para cubrir el suelo cultivado y las zonas de paso.

Además también hay algún árbol frutal junto con especies silvestres como espino albar, arce de Montpellier, saúco, fresno y almez que amplían la biodiversidad. La intención es que hagan de reservorio de semillas para que se vaya reforestando la zona, además de servir de refugio y alimento para los animales (fundamentalmente aves e insectos). También tengo plantadas dos pequeñas carrascas de bellota dulce, que aunque no son apropiadas para este terreno de ribera, si consigo sacarlas adelante servirán también para producir bellotas para reforestar (aunque quizá no lo vean mis ojos, pues tardan muchos años en crecer).

Sería aplicar la idea de la agricultura natural de Massanobu Fukuoka adaptándola al terreno, junto con los conocimientos que ya tenía anteriormente de la agricultura que he visto practicar por esta tierra a padres, abuelos y personas mayores (no la agricultura convencional actual). Una especie de híbrido entre lo foráneo y lo autóctono adaptado a las circunstancias actuales, junto con las nuevas ideas que van surgiendo con la práctica.

La última ha sido la de intentar integrar a los propios animales silvestres en los cultivos, ya no solo a los insectos o pequeños animales sino también a los grandes como son los zorros o jabalíes, intentando buscar un equilibrio entre sus necesidades y las mías. Para ello estoy probando a proteger los espacios en los que me podrían perjudicar, y dejar otros para ellos. De momento los resultados van siendo positivos, pocos destrozos han hecho en relación a lo que podrían haber destruido, y todo ello por necesidad ya que los animales sólo buscan sobrevivir.

Los zorros limpian el terreno de topillos y otros roedores, los jabalíes labran el terreno gratuitamente y lo limpian de parte de los insectos. Así que no todo son perjuicios.

Desde luego prefiero mil veces los destrozos que pueden ocasionar estos animales, antes que a los cazadores. De los que tengo que escuchar algunas estupideces como “que la culpa de las plagas de los topillos la tienen los ecologistas, que los echaron para que comieran las lechuzas”, cuando en realidad son ellos mismos quienes las producen al matar a los pobres zorros indefensos que son sus depredadores naturales.

Con respecto a la caza como medio de subsistencia no he conocido nada parecido por aquí (supongo que a mis 44 años de vida, ya me habría enterado). Más bien tengo recuerdos de los pobres perros abandonados cuando ya no les sirven para cazar, que junto con todos los animales que exterminan son unas víctimas más.

A estos individuos les va el morbo de someter lo indómito – salvaje o silvestre, es decir, aquello que no se somete a su voluntad, siendo por ello unos liberticidas. Su objetivo es dominar no sobrevivir, es por ello que cuando entraron en mi terreno mi vida valía tanto como la de los animales que aniquilan, de lo contrario ni siquiera se habrían acercado sabiendo el peligro que corría si hubieran decidido disparar allí mismo. Me dijeron que sabían que yo estaba allí y a pesar de todo decidieron entrar, de igual forma pasaron de mi persona olímpicamente al dejar que los perros corrieran pisando todas las plantas cual campo de fútbol.

No se si sabes que actualmente el 80% del territorio de este país son cotos de caza, que aún sigue vigente la ley de caza de 1970 (una ley franquista). Y que para cazar todo está reglamentado, así que lo de la subsistencia se lo pasan por el forro de los…

También pienso que si se cazara para subsistir el consumo de carne que necesita una persona es casi testimonial, la mayor parte de la alimentación que necesita un ser humano es de otro origen en estas latitudes donde el clima permite alimentarse directamente de la tierra. Por lo que cazar animales o pescarlos sería algo mínimo, no lo que ocurre en la actualidad. La caza quedaría fundamentalmente para los depredadores carnívoros como los lobos, pero lo gracioso es que a ellos también los cazan.

Entiendo el tipo de cazador al que te refieres, pero estos también fueron presas y de quedar alguno será en algún rincón del planeta que aún no ha sido devastado, o los que queden dentro de algún parque como los bosquimanos (que a fecha de hoy no se si definitivamente ya han desaparecido).

En nuestra península puede que alguien complemente la dieta con la caza por necesidad, pero seguro que son contadísimos. Si sumamos todos los impuestos que hay que pagar para cazar, las armas y la munición igual les saldría más barato comprar la mejor carne ecológica del mercado. O mejor todavía y mucho más económica, si se la crían ellos mismos en su casa. Por lo que cazar para subsistir creo que a fecha de hoy no sale muy rentable que digamos, y si se caza de forma ilegal puede salirles la carne a precio de caviar, pues las multas deben de ser considerables.

Sobre el intervencionismo del Estado, el problema está en que una gran mayoría de personas lo tienen integrado en su interior. De manera que se sirven de las leyes para no respetar a los demás, y por tanto, no nos queda otro remedio que acudir también a la legalidad para defendernos de ellos. Mientras estos individuos no cambien, estaremos en conflicto permanente, pues no respetan nada. No se respetan ni entre ellos mismos, incluso se arrancan las señales de los cotos de caza unos a otros.

Lamentablemente esta es la realidad que se vive por aquí, ya me gustaría que fuese de otra manera. Quizá en tu tierra sí se pueda llegar al entendimiento mediante el uso de la palabra, aquí la palabra frente a estas gentes no vale nada. Como no valió de nada en 1936, cuando la veda quedó abierta para todo ser viviente y el coto de caza alcanzó el 100% del territorio.

En fin, que me alegro de que aún tenga algo de vidilla este foro y nos sigamos comunicando de vez en cuando. Espero que mi respuesta no haya sido demasiado extensa ni demasiado áspera (no era mi intención).

Un cariñoso abrazo, montse