Presentacio

[Carmen Angulo Martos]

Me llamo Carmen, estoy casada desde hace 43 años y soy madre de tres hijas, mi profesión es peluquera y me gusta mi trabajo, el cual sigo ejerciendo.
No tengo claro, que es lo que yo puedo aportar A LA REVOLUCION INTERGRAL.
Deje de la escuela a los diez años, con el certificado de estudios primarios. Por la mala experiencia que tuve en esos años, aborrecí todo lo que tenía que ver con la enseñanza reglad, no por falta de instares, si no, porque me trasmitieron (no verbalmente, si no ignorándome), que yo no serbia.
Mi vida ha sido una constante búsqueda, pues no me resignaba, a la vida que contemplaba a mí alrededor e inicie u trabajo personal para conocerme mejor. La curiosidad, la responsabilidad y el no ser conformista, me ha hecho la mujer que hoy soy, llena de una historia vivencial, muy rica, por mi compromiso, mi amor a la vida y a la humanidad.
La vida, es una de las mejores HUNIVERSIDADES, ella, te pone numerosas carreras para “graduarte”, si estas dispuesta a aprender con lo que te toque vivir. Creo ser una privilegiada, pues, me puso por delante una de las más duras carreras, “ La enfermedad Mental”, no tenía ni idea, que eso existía y la descubrí a los 54 años, atreves de una de mis hijas.
Si digo que es un privilegio, es porque mi hija tras dos años de lucha, lleva siete años, sin síntomas de la enfermedad y con una vida normalizada. Fui consciente que solo podía ayudar a mi hija, adquiriendo conocimiento de la enfermedad, e implicándome en el colectivo. Fueron dos años muy duros, la desprotección social, la falta de humanidad y de recursos, en el Sistema Sanitario Estatal y la falta de recursos de las administraciones, me sirvió para hacer un trabajo personal y tomar consciencia, de la necesidad de apostar por este colectivo. Por eso, cuando mi hija, recupero su salud, tenía muy claro el compromiso que había adquirido; el volcar mi conocimiento, con los afectados y familiares.
Cuando surgió el 15M, vi la posibilidad de hacer más visible al colectivo de “salud mental”, e intente que se crease una comisión para trabajar desde la integración en el movimiento, cosa que no fue posible, por el desinterés y la nula acogida.
Tras tres años intensos en el activismo de mi ciudad, descubrí, que nada era lo que se decía; el ocultismo, la manipulación y la lucha por el poder, también se hacían presente a ras de suelo, , entre los que “creía mis compañeros”. Todo eso y el acoso y derribo que he vivido, por defender a un compañero que padecía una enfermedad mental hizo que me retirara de dicho activismo. La falta de humanidad que he vivido, hizo que me retira.
En este caminar, he tenido la oportunidad de sacar de las garra de la enfermedad e incluso de una posible muerte, a otra persona con enfermedad mental, ha sido dos apuestas muy duras y a la vez maravillosas, pues me ha permitido darme cuenta, de todo el amor que tenemos dentro y que es una fuente inagotable.
Hoy, sigo en la asociación de enfermos mentales, donde estoy en el programa de acompañamiento en los hospitales, a las familias y conduciendo un grupo de ayuda mutua de familiares, donde cada día se me ensancha mas el corazón, por ese fluir que solo se percibe atreves de las relaciones humanas sanas, donde se habla el mismo lenguaje, donde no hay ocultismo, pues todos entendemos el idioma.
Es lo que puedo ofrecer, el cómo, en un momento de mi vida, fui consciente, que vivir, tenía que ser algo más y me convertí en una

[Laura Herrero Román]

Hola, Carmen. Aunque no te conozco aún en persona, disfruto mucho lo que compartimos en la red social cuando el tiempo lo permite. Si algo he aprendido es que no se necesita un título universitario para ser una gran persona y conocer la vida. Admiro tu pasión y la manera en que te implicas en las cosas. Me emocionaste cuando hablaste sobre esa etapa oscura de España en la que tantas personas desaparecieron y todavía hay nietos buscando a sus abuelos o sufriendo por las injusticias que tuvieron que vivir.
Por último, solo quiero decir que me parece que tú llevas lo humano en tus entrañas y, como demuestras al contarnos tus vivencias con las personas que sufren enfermedades mentales, derramas esa enorme parte humana sobre los demás.

Te mando un saludo y espero que algún día nos conozcamos en persona.

[Autor]

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